Cuarenta días por la Vida
13 de Febrero al 24 de Marzo 2011
Día 6
13 de Febrero al 24 de Marzo 2011
Día 6
Viernes, 18 de febrero de 2011
EEUU_Lili cote lili.cote@gmail.com
"Dios no manda cosas imposibles, sino que, al mandar lo que manda, te invita a hacer lo que puedas y pedir lo que no puedas y te ayuda para que puedas".
SAN AGUSTÍN
Reflexión
Las madres están llamadas a ser las primeras defensoras de sus hijos totalmente desamparados que el Señor, Dios de la Vida, les ha confiado a su protección en el seno maternal.
Oración del día
Oremos por la Iglesia, el Papa, los Obispos y los Sacerdotes para que sigan proclamando el Evangelio de la Vida a todos los hombres.
Motivación del día
En los debates acerca del aborto se habla de la libertad de elección de la mujer. Cuando nos acercamos a la realidad de los centros que proveen abortos vemos mujeres que están allí, no porque tienen libertad de elección, sino porque sienten que ellas no tienen otra opción. Se sienten atrapadas, abandonadas, desesperadas y atemorizadas, y algunas han sido llevadas creyendo que el aborto es su única opción.
El Espíritu del Señor, es el único que nos da la libertad de escoger lo que es bueno, cuando nos vemos tentados a escoger contrario. La libertad significa que nosotros ya no tenemos que sentirnos condenados para hacer lo que sabemos está equivocado.
Las mujeres somos privilegiadas con el don de llevar en nuestro vientre la vida. Somos los seres que tenemos parte fundamental en la obra creadora. Cuando tomamos medidas en defensa de la vida, nosotras actuamos a favor de la libertad verdadera, siguiendo el ejemplo de la santísima Virgen María quien con su, Si a la vida, abrió el camino para la liberación del pecado de toda la humanidad.
Compartimos una canción pro vida: Si yo pudiera ser
Esta canción nació del poema “If I could be” escrito por el poeta Virgil Gelormino en Dayton, Ohio. En forma de versos describe lo que un bebe no nacido pudiera ver, ser, hacer si se le diera la oportunidad de nacer. Hacer clic aquí para escuchar la canción.
El Espíritu del Señor, es el único que nos da la libertad de escoger lo que es bueno, cuando nos vemos tentados a escoger contrario. La libertad significa que nosotros ya no tenemos que sentirnos condenados para hacer lo que sabemos está equivocado.
Las mujeres somos privilegiadas con el don de llevar en nuestro vientre la vida. Somos los seres que tenemos parte fundamental en la obra creadora. Cuando tomamos medidas en defensa de la vida, nosotras actuamos a favor de la libertad verdadera, siguiendo el ejemplo de la santísima Virgen María quien con su, Si a la vida, abrió el camino para la liberación del pecado de toda la humanidad.
Compartimos una canción pro vida: Si yo pudiera ser
Esta canción nació del poema “If I could be” escrito por el poeta Virgil Gelormino en Dayton, Ohio. En forma de versos describe lo que un bebe no nacido pudiera ver, ser, hacer si se le diera la oportunidad de nacer. Hacer clic aquí para escuchar la canción.
ORACIÓN ECUMÉNICA
OH Señor, a Ti confiamos la causa de la vida:
mira, Padre el número inmenso de niños
a quienes se impide nacer,
de pobres a quienes se hace difícil vivir,
de hombres y mujeres víctimas de violencia inhumana,
de ancianos y enfermos muertos
a causa de la indiferencia o de una presunta piedad.
Haz que quienes creen en tu hijo sepan anunciar con firmeza y amor
a los hombres de nuestro tiempo el Evangelio de la vida.
Alcánzales la gracia de acogerlo como don siempre nuevo,
la alegría de celebrarlo con gratitud durante toda su existencia
y la valentía de testimoniarlo con solícita constancia,
para construir, junto con todos los hombres de buena voluntad,
la civilización de la verdad y del amor,
para alabanza y gloria de tu Nombre.
Amén
ORACIÓN POR LA VIDA
Oh María, aurora del mundo nuevo,
Madre de los vivientes,
a Ti confiamos la causa de la vida:
mira Madre el número inmenso de niños
a quienes se impide nacer,
de pobres a quienes se hace difícil vivir,
de hombres y mujeres víctimas de violencia inhumana,
de ancianos y enfermos muertos
a causa de la indiferencia o de una presunta piedad.
Haz que quienes creen en tu hijo sepan anunciar
con firmeza y amor a los hombres de nuestro tiempo
el Evangelio de la vida.
Alcánzales la gracia de acogerlo como don siempre nuevo,
la alegría de celebrarlo con gratitud durante toda su existencia
y la valentía de testimoniarlo con solícita constancia,
para construir, junto con todos los hombres de buena voluntad,
la civilización de la verdad y del amor,
para alabanza y gloria de Dios Creador
y amante de la vida.
Amén
Juan Pablo II
Encíclica: Evangelium Vitae sobre el Valor y el Carácter Inviolable de la Vida Humana
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